En esta nueva entrega
del análisis de series, nos introduciremos en un popular programa que ha
quedado en el recuerdo de millones de televidentes como las alegres aventuras
de dos chicos de color en un mundo de ricos. Estamos hablando de Blanco y negro (en inglés ‘’Diff’rent
Strokes’’). Como en la mayoría de las sitcom la
profundidad de lectura parece quedar socavada por las risas grabadas, los
falsos decorados y los reiterados ‘’gags’’,
en esta serie, buscaremos desmenuzar más de una crítica, no solo, sobre el racismo que tensionaba a los Estados
Unidos a finales de los 70’, sino al trabajo infantil dentro del mundo del
entretenimiento.
Blanco y negro
fue el caballito de batalla que logró salvar a la compañía NBC de la quiebra. Protagonizada
por el carismático Arnold Jackson (Gary
Coleman) que luego de quedar huérfano junto a su hermano, Willis Jackson (Todd Bridges) es adoptado por el
millonario, Philip Drummond (Conrad Bain),
que vive en un lujoso apartamento de Park Avenue (Nueva York) junto a su hija blonda de ojos claros y
sonrisa perfecta, Kimberly (Dana Plato)
y su ama de llaves, Edna
Garret ( Charlotte Rae ). Todo el
show tendrá como eje principal la costosa adaptación de estos chicos del
marginal barrio de Harlem, al mundo de los blancos, de los ricos, de los que ‘’triunfan’’.
Esta serie fue
lanzada al aire en Noviembre de 1978
casi sin control de prueba, ya que los dueños de la cadena se encontraban
desesperados por la caída del raiting
ante compañías como NBC y ABC. Casualmente, la figura de Gary Coleman como el
inocente chiquillo logró conquistar a la audiencia, y los números comenzaron a
levantar hasta tal punto que Blanco y
negro se transformó en una de los programas más retransmitidos a nivel
mundial y la frase: "¿De qué estás
hablando, Willis?" logró ser inmortalizada en la mente de millones de
espectadores. La morbosa paradoja
que esconde este show es que se pudo explotar el costado infantil del protagonista
por 8 temporadas debido a una afección renal, que no le permitía crecer con
normalidad. A su vez, esta patología de Coleman se hacía presente durante las
grabaciones y no solo no las posponían, sino que los padres adoptivos del
pequeño actor, lo obligaban a seguir trabajando
(Ya una vez terminada la serie, enfrentaría demandas contra ellos acusándolos de
haberse robado su patrimonio).
Blanco y negro
para los críticos siempre penduló entre dos ideas que subyacían dentro del
show. La primera era que dos chicos de un típico barrio marginal poblado por
afroamericanos pueden tener éxito, si se les brindan iguales oportunidades económicas, familiares, alimenticias y social. El mensaje es que los chicos afroamericanos necesitaban
oportunidades dentro de la sociedad estadounidense. Obviamente, por esa
época las cartas del Ku Klux Kla(KKK) inundaban la recepción de la cadena para
que levanten el programa. Pero a su vez, también se recibían quejas de la
comunidad negra, ya que para ellos la serie instalaba la idea que solo los
afroamericanos tenían posibilidades si eran
ayudados por un blanco. Sin embargo, los ejecutivos hicieron caso omiso a
estas críticas y no solo continuaron con el show, sino que hubo capítulos por
demás controversiales donde se tocaba de cerca la drogadicción, la violación sexual y la pedofilia.
Habiendo finalizado
en 1987, luego de que la NBC levantará el programa en la séptima temporada y
ABC lo reanudará con una última donde la composición de la familia Drummond
había cambiado completamente, los protagonistas parecieron quedar bajo una maldición. Ni Dana Plato (quien tuvo
que dejar la serie por haber quedado embarazada) como Todd Bridges y Gary
Coleman pudieron volver a tener el menor éxito en un nuevo emprendimiento mediático.
No solo lafama se les volvió esquiva, sino que en el caso de Bridges y Palto el consumo de drogas los fue desbastando
hasta tal punto que Plato murió en 1999 de sobredosis. Por otro lado, Gary
Coleman probó suerte en otros shows, incluso como Arnold, pero su aspecto
desmejorado por la enfermedad renal, no lo dejaría seguir interpretando a ese
angelical niño. No solo se vio envuelto en varios escándalos judiciales con sus
padres y su mujer, sino que también tuvo que recurrir a otra serie de trabajos
por quedar en bancarrota y probó suerte como seguridad privada y hasta se postuló a gobernador de California en
las elecciones que finalmente ganaría , Arnold
Schwarzenegger. Murió en Mayo del 2010 a causa de un derrame cerebral a los 42
años.
Blanco
y negro siempre será
recordado por las ocurrentes apariciones en pantalla de Arnold, el amor que
ponderaban los hermanos tanto de sangre como adoptivos y el cuidado de la
figura paterna ante todo .Para nosotros también pasará a la historia televisiva
como aquella serie donde a la hora en que meriendas los jóvenes televidente, dos chicos afroamericanos contaban chistes marcando una diferencia racial y
social entre blancos y negros.
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